El Gobierno de la Ciudad no puede firmar todavía la licencia de primera ocupación del Hospital Universitario porque todavía están pendientes de subsanar “infinidad” de defectos.
Así lo ha confirmado el consejero Miguel Marín, quien señala que la empresa ha solicitado el cuarto modificado de obra, de ahí que le aconseje a la delegada del Gobierno “que se deje de fotos y trabaje”. Cree que, durante el último año, Sabrina Moh tendría que haber estado pendiente “de que las obras del futuro hospital respetasen lo que viene recogido en la normativa urbanística”. Aclara que, “a día de hoy, la obra todavía no ha terminado”.
Insiste en que “es imposible” que la Ciudad Autónoma “haga más” con tal de acelerar “lo máximo posible” la apertura del Hospital Universitario. Arremete contra Moh, a quien acusa de “no ocuparse ni preocuparse de lo importante” y que no es otra cosa “que el hecho de que esa obra esté terminada correctamente”. Dice que la delegada del Gobierno no asume la responsabilidad del cargo que ostenta, de ahí que no le haya exigido a la empresa constructora “máxima celeridad” y que la obra se adecuase “a las normas urbanísticas recogidas para cualquier hospital”.
Con, por ejemplo, puertas que se abren en sentido contrario o con “un montón” de problemas de acceso para personas con movilidad reducida, Marín pide a los socialistas “un mínimo de pudor y de vergüenza”.