Melilla alcanza su pico de incidencia en infecciones respiratorias agudas (IRAs) en la segunda semana del año, aunque implantación de la mascarilla obligatoria en la orden publicada en el Boletín Oficial de la Ciudad Autónoma con fecha de 9 de febrero, ha tenido efectos positivos en la tercera semana.
La Consejería de Políticas Sociales y Salud Pública ha compartido con COPE Melilla los datos aportados por el servicio de Epidemiología de la Administración local sobre la evolución que se ha experimentado en estas patologías. La tasa de diagnóstico en Atención Primaria se sitúa en 1.745,9 casos de IRAs por 100.000 habitantes, siendo de forma predominante en los tramos de edad de 0 a 4 años- con 3.759 casos-, de 5 a 14 años- con 2.317,6 casos- y mayores de 65 años- con 1.932,4 casos-.
Concretamente las cifras relacionadas con el síndrome gripal se han multiplicado por 5,8 en relación con el pico registrado en la semana 46 del 2023, en las registradas por Covid-19 se ha duplicado y por bronquiolitis sube en 1,3 puntos.
En cambio, en el Hospital Comarcal la tasa global se sitúa en 24,7 casos por 100.000 habitantes, asentando un descenso respecto a la primera semana del año. La práctica mayoría de los casos son mayores de 79 años (176,8 casos), seguidos del tramo comprendido entre los 0 y 4 años (112) y los mayores de entre 65 y 79 años (39,5).
Como adelanto de la tercera semana del año, de la que aún no se dispone la totalidad de los datos de la red centinela, del 15 al 21 de enero, la incidencia en Atención Primaria ha descendido a los 1.503,44 diagnósticos, aunque para los técnicos de Salud Pública sería necesario conocer las cifras de la semana actual, confirmando una tendencia a la baja, para “valorar la eliminación de la obligación del uso de las mascarillas” en centros sanitarios, sociosanitarios y farmacias.
La cobertura vacunal de Melilla sigue siendo muy inferior a la media nacional. Los adultos mayores de 65 años están inmunizados frente a la gripe en poco más del 34% de la población, mientras que la tasa de España se sitúa en casi un 63%; en los profesionales sanitarios no alcanza el 20%, casi 30 puntos por debajo del resto y estando a la cola; y en los más pequeños (cohorte 2019-2022) el porcentaje no llega al 5,6%, “muy por debajo de la media” (35,17%).
Frente al Covid-19 los porcentajes continúan siendo muy bajos, todos los tramos de edades en riesgo (mayores de 60 años) se encuentran por debajo del 20%, en cambio, la inmunización con ‘Nirsevimab’- contra el virus respiratorio sincitial- alcanza una cobertura vacunal de un 92% en recién nacidos y un 46,5% en nacidos desde abril.