Somos Melilla critica que en el reglamento de suelos contaminados no se incluyan los terrenos militares y apunta que “es una pena” que en una ciudad de apenas 12 kilómetros cuadrados se alcancen unos niveles de contaminación tan elevados que se localicen cinco puntos negros de vertidos ilegales.
Amin Azmani cree que se debe aumentar el régimen sancionador y las labores de concienciación y sensibilización de la población y lamenta que el documento deja al margen las zonas militares que supone “un alto porcentaje del espacio” en la ciudad donde “sería interesante evaluar la composición del suelo” para que la Ciudad Autónoma pueda tomar medidas medioambientales para el mantenimiento de estas zonas.
Expone un informe realizado por el ambientólogo melillense Javier Sáenz en el que se determina que es “peligroso” consumir alimentos cultivados en el suelo de Melilla porque ente un 70% y un 80% está contaminado. Unas cifras que para el diputado de Somos Melilla “son bastante alarmantes” y que se reflejarán en el censo que se prevé elaborar conforme a este reglamento.
José Ronda responde que la Ciudad Autónoma está elaborando un convenio que próximamente firmará con el Ministerio de Defensa para trabajar en la definición de senderos verdes en determinadas zonas, como puede ser la Pista de Carros, para poder realizar labores de mantenimiento.
Con este reglamento lo que la Ciudad Autónoma pretende, explica el consejero de Medio Ambiente y Naturaleza, es identificar los niveles genéricos de determinados materiales contaminantes que se deben cumplir en los terrenos, “dependiendo de una ubicación u otra”, para establecer las obligaciones que debe atender la incorporación de nuevas actividades que puedan ser “potencialmente contaminantes”.